Educación financiera para niños

Esto es lo que los padres deben tener en cuenta.

Principales conclusiones  

✓  Predique con el ejemplo. Asegúrese de ser un ejemplo para sus hijos en lo que a dinero respecta. . 

✓  Hable sin tapujos sobre el dinero. Las conversaciones sobre finanzas contribuyen a que sus hijos comprendan mejor cómo gestionar el dinero y a promover hábitos financieros saludables.

✓  Ahorre para el futuro de ellos. La educación superior, como la universidad, puede ser cara. Nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para comenzar a ahorrar.

✓  No descuide su futuro. Recuerde que ahorrar para la jubilación es algo que hace por usted y por sus hijos.

Ver todo Cerrar todo

Predique con el ejemplo

Sus hijos le observan y aprenden de usted en todo momento, así que asegúrese de ser todos los días un buen ejemplo en lo que a dinero respecta, como a la hora de controlar sus gastos, ajustarse a un presupuesto, priorizar el ahorro y tener precaución por las deudas. Las lecciones simples, como enseñarles a sus hijos la diferencia entre gastar en cosas que quieren y en cosas que necesitan, pueden marcar una gran diferencia. En realidad, puede usar como herramienta de enseñanza cualquier cosa que implique dinero para enseñar educación financiera a sus hijos.

Hablen sin tapujos sobre el dinero

No es necesario que les cuente a sus hijos su situación financiera con todo lujo de detalles, pero hablar sin tapujos sobre finanzas contribuye a que comprendan mejor la administración del dinero y a promover hábitos financieros saludables. Considere la posibilidad de contarles una meta financiera que tenga, hablar sobre decisiones económicas que haya tomado y de las que sienta orgullo o elaborar un «presupuesto» al que deban ajustarse cuando quieran algo nuevo. Todos estos ejemplos podrían ser formas eficaces de enseñarles a sus hijos el valor del dinero y la importancia de cómo lo administren.

Ahorre para su educación superior

Recuerde que la educación superior, como la universidad y las escuelas de negocios, puede ser muy cara y siempre parece que llega antes de lo que esperábamos. Nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para comenzar a ahorrar.

Hay diferentes tipos de planes de ahorro que le ayudarán a lograrlo. Si puede, intente hacer pequeñas aportaciones mensuales o incluso automatizar sus aportaciones. Otra idea es pedirle a la familia que aporten al plan educativo de sus hijos en lugar de regalarles juguetes en las fiestas o los cumpleaños. Si sus hijos optan por trabajar antes de comenzar sus estudios superiores, también podría ofrecerles algún tipo de programa de complementación. Por ejemplo, por cada cantidad que ellos aporten, usted aportará una suma determinada.  

No se deje para lo último

Cuando piense en las finanzas, no olvide protegerse a usted primero. Antes de empezar a financiar la educación de otra persona, verifique que sus cuentas de jubilación estén en los niveles en los que deberían estar. Si no ha ahorrado lo suficiente para su jubilación, sus hijos podrían terminar teniendo que asumir la responsabilidad financiera de mantenerle. Recuerde que ahorrar para la jubilación es algo que hace por usted y por sus hijos.

1130781.1.0